[FT] «Los problemas psiquiátricos aumentan con el bienestar»

27/10/2004 - 14:22 por Ille Corvus | Informe spam
«Los trastornos mentales serán muy pronto la primera causa de
discapacidad
en nuestra sociedad»

FERMÍN APEZTEGUÍA/BILBAO

Jerónimo Saiz, catedrático y jefe de servicio de Psiquiatría del
hospital
Ramón y Cajal de Madrid, es uno de los cerca de 2.000 profesionales
que
participan en el congreso nacional de la especialidad que se celebra
desde
hoy en Bilbao. El experto aborda en esta entrevista las cuestiones que
centrarán el encuentro. «La enfermedad mental afecta ya a una de cada
cuatro
familias; y todo esto va a más», advierte el especialista.

-¿Cómo es posible que las consultas psiquiátricas estén a rebosar en
la
sociedad de la calidad de vida?

-Hay factores derivados del estilo de vida que favorecen la aparición
de la
enfermedad mental, desde el estrés laboral al abuso del alcohol y las
drogas. La familia, como institución, ya no tiene la solidez de antes
y los
niños se encuentran en el televisor con un mundo de violencia y
terrorismo.
Eso por un lado. Por otro, a medida que aumenta el nivel de
civilización y
bienestar, se producen más patologías psiquiátricas.

-¿Por qué?

-Cuando la supervivencia aprieta, las cuestiones relacionadas con lo
emocional y lo afectivo pasan a un segundo plano.

-El trabajo, que siempre ha dignificado, ¿ahora resulta que enferma?

-La verdad es que sí. Las relaciones laborales ya no se desarrollan en
un
ambiente de confianza, sino más bien de gran competitividad y bastante
deshumanizado. Como consecuencia, han aparecido el acoso
institucional, el
síndrome del trabajador quemado...

-¿Diría que esta sociedad está mal de la cabeza?

-Eso tendría que decirlo un sociólogo, ja, ja. Lo que sí podríamos
decir,
como sanitarios, es que el impacto social y personal de los trastornos
psiquiátricos será muy pronto la primera causa de discapacidad en
nuestra
sociedad.

-¿Tanto como la primera?

-Una de cada cuatro familias tiene un miembro aquejado de un trastorno
mental; y todo esto tiende a ir a más. Los problemas más graves son la
esquizofrenia, la psicosis maniaco-depresiva y la depresión, que
figura
entre las primeras causas de discapacidad, con el alcoholismo y las
drogas.
Existe un segundo grupo formado por los afectados por trastornos de
ansiedad
y las fobias, que también producen mucha discapacidad y sufrimiento.

Lagunas indeseables

-El 10% de la población sufrirá una depresión a lo largo de su vida.
Un
panorama bastante triste.

-Podrían ser más, porque en la depresión también tienen un fuerte
impacto el
envejecimiento, el sexo y los estilos de vida. A la mujer de hoy se le
obliga a ser madre, mujer, cuidadora, a ser atractiva y encima a ser
competitiva en el trabajo, donde sufre la violencia de los compañeros.

-¿Qué puede hacerse para evitar la depresión?

-Lo mejor es detectarla pronto. No es fácil, porque muchas veces se
manifiesta por síntomas físicos como dolores, mareos o malas
digestiones.
Como receta genérica, habría que evitar malos hábitos de vida por
consumo de
fármacos, alcohol, estrés excesivo...

-¿Es posible la felicidad en un mundo en que los niños se quitan la
vida,
los jóvenes no tienen trabajo y los mayores se quejan de desatención?

-Todo eso es cierto, pero nuestra sociedad es incomparablemente mejor
que la
de hace 50 años, y no digamos de la de hace 100. Tenemos esas lagunas,
evidentemente indeseables, y debemos trabajar por una sociedad más
justa;
pero también hay valores como la solidaridad, una mejor educación...
Hemos
ganado en casi todo.

-¿Qué lleva a un niño al suicidio?

-El suicidio en los niños es muy raro y suele relacionarse con fracaso
escolar y enfermedades graves. Otra cosa son los adolescentes y
jóvenes,
entre quienes ha aumentado en algunos países hasta ser la segunda
causa de
muerte, tras los accidentes.

-En las escuelas, ¿los abusones se han convertido en matones?

-Este sí que es un fenómeno relativamente nuevo. Lo ocurrido en
Hondarribia,
donde el acoso de unos compañeros llevó a un menor al suicidio, ha
sido
atroz.

-Las consultas de Psiquiatría se llenan de casos de chavales víctimas
de
malos tratos y con problemas de toxicomanías. ¿Algo va mal?

-Algo va mal. Antes, las madres estaban todo el tiempo en casa y se
dedicaban al cien por cien a sus hijos. Ahora que los dos miembros de
la
pareja trabajan, los menores están más desatendidos. Un reciente
estudio
realizado en Inglaterra revela que al terminar el periodo escolar un
niño ha
pasado trece horas frente al televisor por cada nueve con su profesor.

-¿Cómo influye eso en un chico?

-Genera cierta desorientación en cuestión de valores. El sentido de
reconocerse y pertenecer a algo puede llevar a los chavales a tomar
como
propios valores radicales. A partir de ahí, lo que se produce es
fundamentalismo, intolerancia y, en el peor de los casos, crimen y
destrucción.

-¿La televisión requiere una mayor regulación?

-Lo lógico es que los profesionales tuvieran la iniciativa personal de
regularlo. En todo caso, tal vez estaría bien que el Gobierno
restringiera
contenidos en determinadas franjas horarias que pudieran ser
perjudiciales.

«Desprotegidos»

-¿Es peor el cine o los telediarios?

-Lo peor son los programas basura y algunas series, que son lo menos
educativo. Pero todo eso es también un reflejo de lo que pasa en la
calle.
Ahora ocurre lo mismo que cuando se pedía que no pusiesen desfiles de
moda
por televisión para prevenir la anorexia.

-Anorexia, atracones nocturnos, vigorexia... Cada vez hay más
trastornos
relacionados con la alimentación y el culto al cuerpo.

-Ese es un problema muy serio. La anorexia es de las enfermedades
mentales
más graves, que lleva a la muerte a un porcentaje nada despreciable de
afectadas. Estamos ante patologías en las que se llega a perder la
conciencia de la realidad.

-Y los ancianos ¿están bien protegidos por la psiquiatría?

-Los mayores están desprotegidos porque nuestra sociedad prima la
juventud,
el dinero y el poder. Los que tienen buena salud llevan una vida muy
feliz;
pero los que están enfermos o incapacitados se enfrentan a problemas
añadidos que pueden llevar también a la depresión. El problema de la
tercera
edad está más ligado, en cualquier caso, a las enfermedades
degenerativas,
que van siendo un problema gravísimo. Atañe a quien lo sufre y a su
cuidador.

-¿Qué espera del congreso nacionalde Bilbao?

-La psiquiatría española vive un momento de solidez y de
consolidación.
Tenemos una especiaildad mucho más científica, mucho más capaz, y
ahora
necesitamos desarrollar recursos asistenciales que no son
psiquiátricos,
sino sociales. Hay grandes esperanzas en la genética molecular, la
neuroimagen y las nuevas formas de entender la psicología. Todas estas
cuestiones nos hacen ver el congreso con mucha ilusión y esperanza.

-¿Su receta para la felicidad?

-La felicidad es una utopía, a pesar de que la Organización Mundial de
la
Salud ha dicho que forma parte del estado de salud. Yo creo que la
felicidad
está en la coherencia, en tener un proyecto de vida que le dé sentido
a uno
y en intentar lograrlo con ilusión, fe y esfuerzo. Todo esto nos da un
conjunto dinámico que es capaz de hacernos sentir bien. Es así como se
puede
construir aquello que llamamos felicidad.

http://www.elcorreodigital.com/vizc...C-045.html


Filtrado por /mal educado/ «Tella Llop, JM» desde 2003.10.25
(Kill-File Global):

De muestra un 'boton' http://tinyurl.com/2rxdv (menores de edad no
sigais este enlace).
 

Leer las respuestas

#1 Toro
27/10/2004 - 17:57 | Informe spam
La temática del grupo es Windows XP


"Ille Corvus" escribió en el mensaje news:
«Los trastornos mentales serán muy pronto la primera causa de
discapacidad
en nuestra sociedad»

FERMÍN APEZTEGUÍA/BILBAO

Jerónimo Saiz, catedrático y jefe de servicio de Psiquiatría del
hospital
Ramón y Cajal de Madrid, es uno de los cerca de 2.000 profesionales
que
participan en el congreso nacional de la especialidad que se celebra
desde
hoy en Bilbao. El experto aborda en esta entrevista las cuestiones que
centrarán el encuentro. «La enfermedad mental afecta ya a una de cada
cuatro
familias; y todo esto va a más», advierte el especialista.

-¿Cómo es posible que las consultas psiquiátricas estén a rebosar en
la
sociedad de la calidad de vida?

-Hay factores derivados del estilo de vida que favorecen la aparición
de la
enfermedad mental, desde el estrés laboral al abuso del alcohol y las
drogas. La familia, como institución, ya no tiene la solidez de antes
y los
niños se encuentran en el televisor con un mundo de violencia y
terrorismo.
Eso por un lado. Por otro, a medida que aumenta el nivel de
civilización y
bienestar, se producen más patologías psiquiátricas.

-¿Por qué?

-Cuando la supervivencia aprieta, las cuestiones relacionadas con lo
emocional y lo afectivo pasan a un segundo plano.

-El trabajo, que siempre ha dignificado, ¿ahora resulta que enferma?

-La verdad es que sí. Las relaciones laborales ya no se desarrollan en
un
ambiente de confianza, sino más bien de gran competitividad y bastante
deshumanizado. Como consecuencia, han aparecido el acoso
institucional, el
síndrome del trabajador quemado...

-¿Diría que esta sociedad está mal de la cabeza?

-Eso tendría que decirlo un sociólogo, ja, ja. Lo que sí podríamos
decir,
como sanitarios, es que el impacto social y personal de los trastornos
psiquiátricos será muy pronto la primera causa de discapacidad en
nuestra
sociedad.

-¿Tanto como la primera?

-Una de cada cuatro familias tiene un miembro aquejado de un trastorno
mental; y todo esto tiende a ir a más. Los problemas más graves son la
esquizofrenia, la psicosis maniaco-depresiva y la depresión, que
figura
entre las primeras causas de discapacidad, con el alcoholismo y las
drogas.
Existe un segundo grupo formado por los afectados por trastornos de
ansiedad
y las fobias, que también producen mucha discapacidad y sufrimiento.

Lagunas indeseables

-El 10% de la población sufrirá una depresión a lo largo de su vida.
Un
panorama bastante triste.

-Podrían ser más, porque en la depresión también tienen un fuerte
impacto el
envejecimiento, el sexo y los estilos de vida. A la mujer de hoy se le
obliga a ser madre, mujer, cuidadora, a ser atractiva y encima a ser
competitiva en el trabajo, donde sufre la violencia de los compañeros.

-¿Qué puede hacerse para evitar la depresión?

-Lo mejor es detectarla pronto. No es fácil, porque muchas veces se
manifiesta por síntomas físicos como dolores, mareos o malas
digestiones.
Como receta genérica, habría que evitar malos hábitos de vida por
consumo de
fármacos, alcohol, estrés excesivo...

-¿Es posible la felicidad en un mundo en que los niños se quitan la
vida,
los jóvenes no tienen trabajo y los mayores se quejan de desatención?

-Todo eso es cierto, pero nuestra sociedad es incomparablemente mejor
que la
de hace 50 años, y no digamos de la de hace 100. Tenemos esas lagunas,
evidentemente indeseables, y debemos trabajar por una sociedad más
justa;
pero también hay valores como la solidaridad, una mejor educación...
Hemos
ganado en casi todo.

-¿Qué lleva a un niño al suicidio?

-El suicidio en los niños es muy raro y suele relacionarse con fracaso
escolar y enfermedades graves. Otra cosa son los adolescentes y
jóvenes,
entre quienes ha aumentado en algunos países hasta ser la segunda
causa de
muerte, tras los accidentes.

-En las escuelas, ¿los abusones se han convertido en matones?

-Este sí que es un fenómeno relativamente nuevo. Lo ocurrido en
Hondarribia,
donde el acoso de unos compañeros llevó a un menor al suicidio, ha
sido
atroz.

-Las consultas de Psiquiatría se llenan de casos de chavales víctimas
de
malos tratos y con problemas de toxicomanías. ¿Algo va mal?

-Algo va mal. Antes, las madres estaban todo el tiempo en casa y se
dedicaban al cien por cien a sus hijos. Ahora que los dos miembros de
la
pareja trabajan, los menores están más desatendidos. Un reciente
estudio
realizado en Inglaterra revela que al terminar el periodo escolar un
niño ha
pasado trece horas frente al televisor por cada nueve con su profesor.

-¿Cómo influye eso en un chico?

-Genera cierta desorientación en cuestión de valores. El sentido de
reconocerse y pertenecer a algo puede llevar a los chavales a tomar
como
propios valores radicales. A partir de ahí, lo que se produce es
fundamentalismo, intolerancia y, en el peor de los casos, crimen y
destrucción.

-¿La televisión requiere una mayor regulación?

-Lo lógico es que los profesionales tuvieran la iniciativa personal de
regularlo. En todo caso, tal vez estaría bien que el Gobierno
restringiera
contenidos en determinadas franjas horarias que pudieran ser
perjudiciales.

«Desprotegidos»

-¿Es peor el cine o los telediarios?

-Lo peor son los programas basura y algunas series, que son lo menos
educativo. Pero todo eso es también un reflejo de lo que pasa en la
calle.
Ahora ocurre lo mismo que cuando se pedía que no pusiesen desfiles de
moda
por televisión para prevenir la anorexia.

-Anorexia, atracones nocturnos, vigorexia... Cada vez hay más
trastornos
relacionados con la alimentación y el culto al cuerpo.

-Ese es un problema muy serio. La anorexia es de las enfermedades
mentales
más graves, que lleva a la muerte a un porcentaje nada despreciable de
afectadas. Estamos ante patologías en las que se llega a perder la
conciencia de la realidad.

-Y los ancianos ¿están bien protegidos por la psiquiatría?

-Los mayores están desprotegidos porque nuestra sociedad prima la
juventud,
el dinero y el poder. Los que tienen buena salud llevan una vida muy
feliz;
pero los que están enfermos o incapacitados se enfrentan a problemas
añadidos que pueden llevar también a la depresión. El problema de la
tercera
edad está más ligado, en cualquier caso, a las enfermedades
degenerativas,
que van siendo un problema gravísimo. Atañe a quien lo sufre y a su
cuidador.

-¿Qué espera del congreso nacionalde Bilbao?

-La psiquiatría española vive un momento de solidez y de
consolidación.
Tenemos una especiaildad mucho más científica, mucho más capaz, y
ahora
necesitamos desarrollar recursos asistenciales que no son
psiquiátricos,
sino sociales. Hay grandes esperanzas en la genética molecular, la
neuroimagen y las nuevas formas de entender la psicología. Todas estas
cuestiones nos hacen ver el congreso con mucha ilusión y esperanza.

-¿Su receta para la felicidad?

-La felicidad es una utopía, a pesar de que la Organización Mundial de
la
Salud ha dicho que forma parte del estado de salud. Yo creo que la
felicidad
está en la coherencia, en tener un proyecto de vida que le dé sentido
a uno
y en intentar lograrlo con ilusión, fe y esfuerzo. Todo esto nos da un
conjunto dinámico que es capaz de hacernos sentir bien. Es así como se
puede
construir aquello que llamamos felicidad.

http://www.elcorreodigital.com/vizc...C-045.html


Filtrado por /mal educado/ «Tella Llop, JM» desde 2003.10.25
(Kill-File Global):

De muestra un 'boton' http://tinyurl.com/2rxdv (menores de edad no
sigais este enlace).

Preguntas similares