Los Científicos Internacionales Apelan a la ONU para Proteger a los Humanos y a la Fauna contra los Campos Electromagnéticos y la Tecnología Inalámbrica

El día de hoy, 190 científicos de 39 países presentaron una apelación a la ONU, a los estados miembros de la ONU y a la Organización Mundial de la Salud (OMS) solicitando que adopten directrices de exposición más protectoras para los campos electromagnéticos (electromagnetic fields, EMF) y la tecnología inalámbrica ante la creciente evidencia del riesgo. Estas exposiciones son una forma de rápido crecimiento de la contaminación del medio ambiente a nivel mundial.

La “International EMF Scientist Appeal” le pide al Secretario General y a los organismos afiliados a la ONU que fomenten medidas cautelares para limitar la exposición de los EMF, y que eduquen al público acerca de los riesgos para la salud, sobre todo para los niños y las mujeres embarazadas.

La Apelación destaca las posiciones contradictorias de la OMS acerca del riesgo de los EMF. La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la OMS clasificó la radiación por Radiofrecuencia como "Cancerígeno Posible" del Grupo 2B en 2011, y los campos de Frecuencia Extremadamente Bajas en 2001. No obstante, la OMS sigue ignorando las recomendaciones de su propia agencia y favorece las directrices recomendadas por la Comisión Internacional sobre Protección Radiológica No Ionizante (International Commission on Non-Ionizing Radiation Protection, ICNIRP). Estas directrices, desarrolladas por un grupo autoseleccionado de expertos de la industria, siempre han sido criticadas como no protectoras.

La Apelación invoca a la ONU a fortalecer sus advertencias sobre el riesgo de los EMF para los seres humanos y a evaluar el impacto potencial sobre la vida silvestre y otros organismos que viven bajo los auspicios del Programa Ambiental de las Naciones Unidas, en línea con la ciencia que demuestra el riesgo, resolviendo de ese modo esta inconsistencia.

Martin Blank, PhD, de Columbia University, señala, "Las directrices internacionales de exposición para los campos electromagnéticos deben fortalecerse para reflejar la realidad de su impacto en nuestro cuerpo, sobre todo en nuestro ADN. El tiempo para lidiar con los efectos biológicos y perjudiciales para la salud es de larga data. Debemos reducir la exposición mediante al establecer directrices más protectoras".

Joel Moskowitz, PhD, de la Universidad de California, Berkeley, señala, "Las directrices de ICNIRP establecen normas de exposición para los umbrales de calefacción de tejido de alta intensidad a corto plazo. Estos no nos protegen de las exposiciones crónicas de baja intensidad, comunes hoy en día. Los científicos que firman la Apelación solicitan que la ONU y las naciones miembro protejan a la población humana y a la vida silvestre mundial de la exposición a los EMF".

International EMF Scientist Appeal: EMFscientist.org

Declaración en Video (3 min.) por el Portavoz Martin Blank, PhD: EMFscientist.org

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